¿Por qué Haití es pobre?

¿Por qué Haití es pobre? Esta es una de las preguntas peor respondidas por los dominicanos e incluso por los mismos haitianos, este tema suele tratarse de manera simplista e incluso con argumentos tan ridículos como: “los haitianos son pobres porque son haraganes”, “son pobres porque no creen en dios”, etc.

            Lejos de estos argumentos está la realidad, y es que Haití es tan pobre porque ha sido y está siendo sometido a una situación de súper-explotación por empresas transnacionales que representan los poderes económicos de potencias como EE.UU, Francia, entre otras. El poder militar de la ONU representado por la MINUSTAH (Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití, por su acrónimo en francés) no ha servido más que para llevar desgracias a Haití como la pasada pandemia del cólera que dejó más de 8 mil muertos y centenares de miles afectados en Haití, varios muertos y más de 400 infectados en Rep. Dominicana y 300 casos en Venezuela. Este cuerpo militar también representa a la industria militar norteamericana que es un gran motor de la economía de EE.UU.

            Recientemente una investigación realizada por la organización sin fines de lucro Propublica y la organización mediática NPR, reveló irregularidades de la Cruz Roja Americana en el manejo de las donaciones para damnificados. Resulta que la Cruz Roja Americana recaudó 500 millones de dólares desde el 2010 y hasta la fecha solo se han construido 6 casas.

Si a lo anterior le sumamos el saqueo que se lleva a cabo en Haití de los recursos naturales producto de tener un Estado débil y sin Fuerzas Armadas (recordemos que el expresidente Jean-Bertrand Aristide suprimió las Fuerzas Armadas de ese país por miedo a ser derrocado nueva vez en 1995), el tráfico de personas, tráfico de armas, tráfico de drogas y pare usted de contar negocios ilícitos, con todo eso podemos ver que hay muchos grupos económicos interesados en mantener a Haití pobre y desorganizado.

Haití es un negocio y la realidad es que a nadie le interesa el progreso de ese país exceptuando a República Dominicana, nosotros si queremos que Haití deje de ser pobre, en primer lugar porque nos duele ver la miseria que sufren esos millones de seres humanos y también porque somos los principales afectados de la pobreza y de la delincuencia que se cruza por la frontera.

Los dominicanos no somos mezquinos, el problema es que R.D es un país pobre y no podemos asumir la pobreza de otro país pero deben saber todos los dominicanos que todo lo que pase en Haití le incumbe a R.D, los haitianos no van a dejar de emigrar, el ser humano no se deja morir de hambre, igual que emigró el pueblo de Israel de la mano de Moises, igual que emigramos los dominicanos, los haitianos seguirán cruzando nuestra frontera en busca de mejor calidad de vida.

Los gobiernos dominicanos deberían trabajar una política bilateral de desarrollo integral con los gobiernos haitianos pero en vista de la indiferencia de los gobernantes haitianos (que son sobornados por todos los poderes económicos antes mencionados) somos los dominicanos quienes debemos tomar carta en el asunto seriamente para emancipar al pueblo de Haití, hacer posible la vida digna en ese país y resolver de una vez por todas el problema de la inmigración ilegal.

En primera instancia debemos exigir a la ONU que saque a la MINUSTAH de nuestra isla (como lo han hecho intelectuales de la talla de Eduardo Galeano y 3 Premios Nobel de la Paz) ya que es evidente que han fracasado en su misión, segundo, las fuerzas armadas dominicanas deben tomar el control de Haití, librar a Haití de los exageradamente corruptos políticos haitianos y garantizar que las ayudas enviadas a los damnificados se usen para tales fines.

No estamos hablando de una guerra porque las guerras son militares contra militares y Haití no tiene F.F.A.A, tampoco hablo de matar a los ciudadanos haitianos, hablo claramente de liberar a Haití de la corrupción, el saqueo y las violaciones que se cometen en ese país que a fin de cuentas también nos perjudican a nosotros los dominicanos.

Haití fue la primera nación libre de Latinoamerica, sin embargo, hoy es el país más pobre de todo el continente, como seres humanos que somos no podemos quedarnos indiferentes ante el abuso que se está cometiendo contra una nación hermana en nuestras propias narices.

Con el odio irracional que se está fomentando entre nuestros pueblos podríamos llegar a una violencia descontrolada que provocaría que la ONU mande a intervenir R.D para “restablecer el orden” y ahí si nos vamos a joder. Hay que tomar cartas en el asunto, de manera contundente.

Los haitianos no son nuestros enemigos, son nuestros hermanos y debemos ayudarlos.

        Juan Vargas.

Dios, Patria y Libertad.

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